Con el afán de salvaguardar el bienestar del medio ambiente, así como la fauna y flora de su alrededor, agentes de la Fiscalía General del Estado de Baja California acudieron a un predio en el municipio de Tecate, donde con base a denuncias de vecinos constataron que se cometían delitos de contaminación ambiental y maltrato animal.
Fue el pasado viernes a las 12:30 horas que catearon con orden en mano, el predio ubicado sobre la carretera Tecate–Mexicali, en una empresa dedicada a la construcción y realizar reparaciones al asfalto carretero. Se detectó la emisión de residuos tóxicos, gases contaminantes y partículas de polvo, lo que generó la muerte de dos becerros propiedad de rancheros de la zona.
Además había una gran cantidad de desechos contaminantes, residuos tóxicos vertidos sobre el suelo, dicha constructora no contaba con los permisos necesarios para su operación, y ya había sido clausurado en dos ocasiones anteriores por parte del Municipio de Tecate y por la Procuraduría de Protección al Ambiente del Gobierno del Estado, los operadores rompieron los sellos y siguieron operando.