Porque Víctor Manuel “N” está como el pato de la patita, que no da nada para comer, se le imputó por el delito de incumplimiento de las obligaciones de asistencia familiar, y se le fijó una fecha para que se presentara a audiencia y ver si ya se había reportado con la madre de sus hijos, pero no solo no ha aportado “el chivo”, sino que tampoco fue a la cita con el juez.
El desobligado, quien llevaba su proceso en libertad en el puerto de San Felipe, por lo que el Juez de Control modificó la medida cautelar impuesta al imputado, le fue reabierto el proceso penal y la medida cautelar previamente establecida se le cambió por prisión preventiva justificada.
Este vaquetón dejó de proporcionar de manera constante, injustificada y dolosa, alimento, vestido y calzado a su hija menor de edad, desde enero de 2014, incumpliendo con el deber legal de proveer lo necesario para su desarrollo, colocándola en una situación de vulnerabilidad. Y de pilón no fue a su audiencia por lo que se le giró orden de aprehensión.
